Migrar un servidor físico a una máquina virtual en VMware puede parecer un proceso complicado, pero en realidad es bastante sencillo si sigues estos pasos:
Preparar el equipo para la migración de físico a virtual.
Lo primero que debes hacer es preparar el servidor físico para la migración.
Asegúrate de que esté actualizado y funcionando correctamente antes de iniciar el proceso de migración.
Tanto si es un equipo Windows como Linux, recomendamos que esté totalmente actualizado. En equipos Windows, te recomendamos que ejecutes el siguiente comando, desde una terminal con permisos de administrador:
sfc /scannow
Espera a que finalice y reinicia el equipo.
Además, tampoco está de más que si se trata de discos duros mecánicos se realice un desfragmentado del disco y una comprobación de la integridad de los archivos.
Todas estas tareas, si bien no son imprescindibles, nos evitarán errores durante el proceso de virtualización de la máquina, que pueden alargar el proceso más de lo deseado.
Utilizando VMware Converter.
Descarga e instala VMware Converter en el servidor físico (la máquina que vamos a virtualizar).
Esta herramienta te permitirá migrar el servidor físico a una máquina virtual. Puedes descargarla desde la web de VMware. Es necesario que te registres en su página y crees una cuenta. Una vez lo hayas hecho accede a la sección de descargas y guarda en tu equipo la aplicación. Se trata de una herramienta gratuita.
Abre VMware Converter. Selecciona la opción «Convertir máquina física«.
Selecciona el servidor físico que deseas migrar. Puedes ejecutar el programa en la propia máquina que quieres transformar en máquina virtual o hacerlo desde otra.
Si lo haces desde la propia máquina a convertir, tienes que estar validado con una cuenta que tenga permisos de administrador. En cambio, si lo haces desde otro equipo te pedirá que le indiques la IP de la máquina que quieres convertir y un usuario y contraseña con permisos de administrador de ese equipo.
Especifica la ubicación donde deseas almacenar la máquina virtual. Habitualmente será un host que cuente con un ESXi instalado y configurado, pero dependerá de tu entorno.
Configura la máquina virtual según tus necesidades. Es importante asegurarse de que la máquina virtual tenga suficiente capacidad de almacenamiento, memoria y otros recursos para ejecutar el sistema operativo y las aplicaciones que se utilizarán.
Inicia el proceso de migración. Dependiendo del tamaño del servidor físico, este proceso puede tardar varias horas. Asegúrate de que el servidor físico esté disponible durante todo el proceso de migración.
Después de la migración del servidor físico a virtual VMware.
Una vez que el proceso de migración haya finalizado, inicia la máquina virtual en VMware para asegurarte de que todo esté funcionando correctamente.
Realiza las pruebas necesarias para asegurarte de que la máquina virtual esté funcionando tal y como esperabas. Si encuentras algún problema, revisa la configuración de la máquina virtual para asegurarte de que coincide con la máquina original.
En resumen.
Migrar un servidor físico a una máquina virtual en VMware es un proceso sencillo si sigues estos pasos:
- Prepara el servidor físico para la migración.
- Descarga e instala VMware Converter.
- Configura la máquina virtual de destino según tus necesidades.
- Inicia el proceso de migración.
- Cuando finalice, realiza las pruebas necesarias para asegurarte de que todo esté funcionando correctamente.
Con estas sencillas instrucciones, podrás migrar tu servidor físico a una máquina virtual en VMware en poco tiempo.